Confer Coval

Relectura Actualizada Voto Pobreza - Fray José Luis Coll - 19 enero - Sede Confer Valencia

La tarde del viernes 19 de enero, recibimos en la sede CONFER Valencia (organizadora del evento), a Fray José Luis Coll que impartía una charla interesantísima sobre "El voto de pobreza en los consagrados", y veintiocho participantes, de distintas congregaciones o institutos, fueron los asistentes que la disfrutaron.

 

Compartimos su lectura...

 

UNA RELECTURA ACTUALIZADA DEL VOTO DE POBREZA

 

Introducción

 

1.- Pobreza y pobres

El concepto de pobreza ha cambiado

En este contexto socioeconómico, basado en el bienestar, los pobres tienen rostro y aparecen diversos tipos de pobreza en nuestra sociedad: paro, crisis familiar, dependencias o adicciones, inmigración, ancianidad y soledad.

Nuestro voto de pobreza tiene que ver con la real y palpable pobreza que nos rodea.

 

2.- Seguidores de la pobreza de Jesucristo

La raíz del voto de pobreza la encontramos en el seguimiento de Jesús que fue pobre y vivió como pobre.

Jesús “siendo rico, se hizo pobre”, su pobreza no es un anuncio social, una condición sin más, su pobreza nos eleva a Dios, al Padre, Dios es el Bien total.

La pobreza evangélica no es ascesis y recorte, sino es gracia de haber sido llamado al seguimiento y al Reino, de haber sido escogidos para estar contentos con el Señor y cantar que le pertenecemos

Jesús, en el Evangelio, señala unas condiciones para seguirle, una de ellas es el ser pobre. Recordemos algunos textos.

 En Mt 10, 1-42: “No toméis oro, ni plata, no cobre…”

 En Mt 19, 21: “Si quieres ser perfecto, vete, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en el cielo; luego ven y sígueme”.

 En Mt 8, 20: “Las zorras tienen guarida, y las aves del cielo nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene donde reclinar su cabeza”.

 Así pues, ser pobres es forma de ser y de estar en el mundo, es una forma de ser y estar en la que, a través de nuestro ser pobres, hacemos de nuestra vida y pobreza un canto al Dios cuya esencia es puro don y generosidad.

 

3.- Posturas de fondo para vivir la pobreza hoy

La primera postura: Frente a la idolatría del bienestar, austeridad.

La segunda postura: Frente al desarrollo inhumano, defensa de la persona.

La tercera postura: Frente a la cultura individualista, solidaridad.

La cuarta postura: Frente a la insensibilidad social, misericordia.

 

4.- Apuntes para vivir la pobreza hoy. Hacia un corazón pobre

· Hacer voto de pobreza evangélica significa seguir a Jesús, pobre y desnudo en la cruz; ser y vivir como pobres como lo hizo Jesús y su madre la Virgen María. La razón de ser de

nuestro compromiso está en Jesús.

· Hacer voto de pobreza evangélica significa vivir como pobres renunciando a la propiedad privada, a la ostentación, al poder como dominio sobre los demás.

· Hacer voto de pobreza significa adoptar la vida y condición de los pequeños de la sociedad, morando entre ellos como lo que somos o hemos de ser, pobres.

· Hacer voto de pobreza evangélica significa vivir del trabajo, de nuestras propias manos y sudor. El trabajar es un signo de nuestra condición de pobres, no vivimos ociosos y sin hacer nada, el apóstol Pablo afirma: “ si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.

· Hacer voto de pobreza evangélica significa trabajar con el pobre. La Buena Noticia de Jesús va dirigida a los pobres: “El Espíritu me ha ungido para dar la Buena Noticia a los pobres” (Lc 4,18).

· Hacer voto de pobreza evangélica significa vivir en discernimiento continuo. La pobreza es una batalla de toda la vida.

· Hacer voto de pobreza evangelica significa vivir libres y en libertad. Esto es cierto la pobreza evangélica nos hace libres, en otras palabras, la libertad está asociada a la pobreza.

 

Finalmente…

La pobreza evangélica lejos de oprimir nos libera del yugo de una sociedad que, centrada en el despilfarro, en el aparentar, en la desigualdad, en la injusticia. La pobreza de los pobres es una injusticia tolerada por nuestra sociedad, sin embargo, la pobreza evangélica es liberadora y signo profético del Reino de Dios.